El periodo medio de pago (PMP) a proveedores de las empresas se situó en los 84,3 días en el primer trimestre del año, 24 días por encima del plazo máximo legal, según señala la patronal de las pymes Cepyme en su Observatorio de Morosidad.
Todos los sectores registraron aumentos del PMP y la brecha territorial subió a 56,1 días entre Castilla y León, la autonomía con periodo medio de pago más bajo (69,3 días) y Navarra, la que depara mayor demora en los pagos, con 125,4 días.
La evolución fue variable según tamaño de empresa, oscilando entre los 89,5 días en las microempresas y los 83,2 en las medianas, y aumentó en todos los segmentos, salvo en el de grandes empresas (donde disminuyó en 3,3 días).
“Esta evolución supone un grave lastre para las empresas españolas”, considera Cepyme, que apunta también que el coste financiero de la deuda comercial para las empresas ascendió a un máximo de 2.930 millones de euros, el dato más alto desde septiembre de 2009.
El 46,1 % de las facturas se pagan hasta 30 días después y el 9,7 % a más de 30 días del vencimiento, explica Cepyme, que ve necesario un impulso a la futura normativa europea de morosidad para mitigar sus efectos negativos y lograr condiciones equitativas para las pymes de la UE, que actualmente fija el plazo máximo legal de pago en 60 días. Para agilizar este proceso, Cepyme insta al Consejo de Competitividad de la UE a que opte por la vía del reglamento, en lugar de la directiva, con el fin de homogeneizar más efectivamente las diferentes normas nacionales.